En la primavera de
1775, tras más de una década de agitación contra las políticas inglesas y las
primeras batallas de la Guerra de la Independencia, las 13
colonias estadounidenses enviaron representantes al primer Congreso Continental celebrado
en Filadelfia. Después de mucho debate acerca de cortar los vínculos con Gran
Bretaña.
Al día siguiente, en una carta a su esposa, el representante de Massachusetts, John Adams, dijo que la fecha "debía hacerse solemne con pompa y desfiles, con demostraciones, juegos, deportes, fusiles, campanas, fogatas e iluminaciones de uno a otro confín de este continente de ahora en adelante y para siempre jamás".
Así, dos días después de su importante voto, el Congreso Continental aprobó la Declaración de Independencia y envió copias a todo el país. La declaración estaba fechada el 4 de julio, que la nueva nación adoptó como el Día de la Independencia.